Jardines verticales y terrazas verdes.
-
Estética y belleza: Los jardines verticales y las terrazas verdes añaden un elemento decorativo a cualquier espacio, ya sea interior o exterior. Las plantas proporcionan colores vibrantes, texturas interesantes y una sensación de frescura que puede mejorar el aspecto visual de cualquier entorno.
​
-
Optimización del espacio: Los jardines verticales y las terrazas verdes son ideales para maximizar el uso del espacio, especialmente en áreas urbanas donde el espacio es limitado. Pueden instalarse en paredes, vallas, balcones o techos, convirtiendo superficies verticales en áreas verdes funcionales.
-
Mejora de la calidad del aire: Las plantas actúan como filtros naturales que absorben el dióxido de carbono y otros contaminantes del aire, mientras liberan oxígeno. Esto contribuye a mejorar la calidad del aire y a reducir la contaminación en entornos urbanos.
​
-
Aislamiento térmico y acústico: Los jardines verticales y las terrazas verdes pueden actuar como aislantes naturales, ayudando a regular la temperatura interior y a reducir el ruido exterior. Esto puede conducir a un ambiente interior más confortable y tranquilo.
-
Reducción del efecto isla de calor: En áreas urbanas, donde el concreto y el asfalto absorben y retienen el calor, los jardines verticales y las terrazas verdes pueden contribuir a reducir el efecto isla de calor al proporcionar áreas de vegetación que ayudan a enfriar el ambiente circundante.
​
-
Fomento de la biodiversidad: Los jardines verticales y las terrazas verdes pueden atraer una variedad de insectos beneficiosos, aves y otros animales, fomentando así la biodiversidad en entornos urbanos y contribuyendo a la conservación de la vida silvestre.
-
Reducción del estrés y mejora del bienestar: Estudios han demostrado que la presencia de plantas y vegetación puede reducir el estrés, mejorar el estado de ánimo y aumentar la sensación de bienestar en las personas que interactúan con ellas.
​
-
Poner un jardín vertical o una terraza verde no solo embellece el entorno, sino que también proporciona una serie de beneficios prácticos que incluyen mejoras en la calidad del aire, el aislamiento térmico y acústico, la biodiversidad y el bienestar general de las personas.
